domingo, 24 de septiembre de 2017

La minifalda, un elemento más de la pornificación y desmaternización de la mujer aunque suene "antiguo"



Mala y superficial explicación por Infobae


¿Te acordás, Milonguita? Vos eras - la pebeta más linda 'e Chiclana; - la pollera cortona y las trenzas, y en las trenzas un beso de sol. (Milonguita. Tango. 1920)

En realidad el acortamiento de faldas siempre fue un arma de encantamiento femenino pero su difusión es consecuencia de la revolución de la píldora anticonceptiva antiovulatoria (aprobada por la FDA estounidense en 1960) que liberó a la mujer de las consecuencias "indeseadas" de la hiperestimulación erótica. Si fue o no una "liberación" y las consecuencias de la desmaternización de la mujer es un fenómeno social en pleno desarrollo, pero tengo para mí algo más que la presunción que el balance será negativo. El factor alarmante, desconcertante y mal explicado del crecimiento exponencial de la "violencia de género" tiene directo origen en la imagen degradada pornificada y prostituída de la mujer-madre que pasó a mujer-objeto y en el aumento numérico de los compañeros sexuales, promiscuidad y superficialidad de las relaciones. Y aunque desde el principio de la historia, empezando por Cleopatra, siguiendo por Isabel la inglesa y la española y muchos etcéteras, siempre hubo mujeres encumbradas en los más altos podios políticos y sociales, el empoderamiento laboral -el costado "positivo"- por el alejamiento de funciones maternales es muy relativo. Por más "leyes de género" y cupos que inventen las mujeres siguen ganado mucho menos y en posiciones inferiores. El balance final en el 2060 vaticino será totalmente negativo y volverá entonces a valorizarse la naturaleza integral de la mujer.

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